(CNN Español) - Un grupo de garimpeiros, buscadores de piedras preciosas en la Amazonía, habrían asesinado a unos 20 indígenas de una tribu aislada de la civilización, según denuncia la Fundación Nacional del Indio de Brasil (Funai), un hecho que ya está siendo investigado por el Ministerio Público Federal en Amazonas y la Policía Federal, según informó Agencia Brasil, la agencia de noticias estatal de ese país.

Según Funai, los hechos ocurrieron en agosto cerca de la frontera con Perú. Explican que tuvieron conocimiento de la presunta masacre pues algunos garimpeiros "fueron vistos en el municipio de Sao Paulo de Olivença, en el oeste del Amazonas, hablando sobre el ataque. Servidores de la Funai hicieron el primer levantamiento y entendieron que era necesario presentar la denuncia".

Funai explica que los mineros fueron arrestados y llevados a rendir testimonio.

"No confirmaron las muertes y hasta el momento no se encontró ninguna prueba material que comprueba la presunta masacre, por lo que no es posible confirmar la veracidad de las muertes", afirman.

El Ministerio Público Federal dice que aún no hay confirmaciones de muertes, según reporta Agencia Brasil, "pero que las sospechas están siendo depuradas y hay nuevas diligencias en curso", añaden.

La supuesta masacre llegó hasta el Congreso Nacional, informa Agencia Brasil.

"Como vemos, es una denuncia de la mayor gravedad. Veinte indios, llamados flecheiros, que vivían aislados en esa área de la Amazonia y que fueron asesinados. Y, según informaciones que nos llegaron, sus cuerpos fueron descuartizados, incluso. Nosotros de la comisión queremos exigir el recuento de los hechos por el MPF y la PF y que el Ministerio de Justicia y el Gobierno Federal se pronuncien", pidió el senador y vicepresidente de la Comisión de Derechos Humanos del Senado, Paulo Paim.

La zona donde habita esta tribu queda aislado en la selva, a unas "12 horas en barco en ese período de sequía", afirma Funai. Se trata de la Tierra Indígena Vale do Javari, una de las reservas indígenas más grandes de Brasil y donde se encuentran miles de indígenas, la mayoría aislados del mundo moderno.

"A finales del mes de agosto se desencadenó una operación de combate a la minería ilegal en la misma región, que resultó en la destrucción de cuatro dragas", explica Funai. En este proceso también se aplicó una multa a los garimpeiros por crimen ambiental.

"El MPF está llevando a cabo un procedimiento administrativo que investiga el garimpo ilegal en el Río Jandiatuba. La institución viene recibiendo denuncias de la Funai y de los propios habitantes, a causa de la violencia que el garimpo genera, de la prostitución infantil, de las amenazas e incluso de homicidios ", refuerza el MPF en una nota.

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