Por Alayna Treene, Pamela Brown, Haley Britzky y Oren Liebermann

(CNN) — Se espera que el presidente Donald Trump firme el lunes cuatro órdenes ejecutivas que remodelarían el ejército, incluida la prohibición de que los miembros del servicio transgénero sirvan en las fuerzas armadas de EE. UU., el desmantelamiento de los programas de Diversidad, Equidad e Inclusión del ejército y el reintegro con pago retroactivo de los miembros del servicio que fueron dados de baja por negarse a vacunarse contra el covid-19 , dijeron a CNN dos funcionarios de la Casa Blanca.

Las órdenes, que fueron reportadas primero por el New York Post , llegan cuando el candidato de Trump para dirigir el Pentágono, Pete Hegseth, prestó juramento como secretario de Defensa el sábado. Hegseth ha declarado durante mucho tiempo que planeaba implementar importantes cambios culturales en el ejército, incluido el fin de las prácticas de DEI y la eliminación de los miembros del servicio "despiertos".

Momentos después de su llegada al Pentágono el lunes, Hegseth dijo a los periodistas que “vienen más órdenes ejecutivas”.

“Hoy, se avecinan más órdenes ejecutivas… sobre la eliminación de la DEI dentro del Pentágono, el restablecimiento de las tropas que fueron expulsadas debido a los mandatos de Covid, la cúpula de hierro para Estados Unidos; esto está sucediendo rápidamente y, como secretario de defensa, es un honor saludar con elegancia como lo hice cuando era un oficial subalterno y ahora como secretario de defensa para asegurar que estas órdenes se cumplan con rapidez y rapidez”, dijo Hegseth.

Trump había prohibido a los estadounidenses transgénero servir en el ejército en 2017 durante su primera administración, pero el entonces presidente Joe Biden emitió una orden en 2021 derogando la prohibición.

Horas después de haber sido juramentado para su segundo mandato la semana pasada, Trump firmó una orden que revoca la medida de 2021 de la administración Biden de permitir que los miembros transgénero presten servicio. Sin embargo, se espera que la orden que Trump firme el lunes va aún más allá, dijo uno de los funcionarios, y describirá nuevos estándares militares con respecto a los pronombres de género y establecerá que la preparación mental y física requiere que los miembros transgénero del servicio sean excluidos del ejército.

“Pueden pasar al menos 12 meses hasta que una persona complete los tratamientos después de una cirugía de transición, que a menudo implica el uso de narcóticos fuertes. Durante este período, no están físicamente capacitados para cumplir con los requisitos de preparación militar y requieren atención médica constante. Esto no es propicio para el despliegue u otros requisitos de preparación”, dijo uno de los funcionarios, citando una hoja informativa.

“La implementación [de la prohibición] está en manos del Departamento de Defensa en lo que respecta a los detalles”, dijo el funcionario. En 2018, había aproximadamente 14.000 miembros transgénero en el servicio militar de Estados Unidos, según el Palm Center , un instituto de investigación independiente que ha realizado una amplia investigación sobre las minorías sexuales en el ejército.

Un memorando del Pentágono que detallaba la prohibición durante el primer mandato de Trump recomendaba hacer excepciones para los militares transgénero que ya estaban sirviendo en uniforme y que se habían unido al ejército bajo políticas anteriores antes de que la prohibición entrara en vigor; aquellos que no requieren un cambio de género; y aquellos que habían sido "estables durante 36 meses consecutivos en su sexo biológico antes de la adhesión".

No está claro si la nueva prohibición del gobierno también tendrá excepciones. Cuando se le preguntó sobre posibles excepciones el lunes, Hegseth solo dijo que habrá una orden ejecutiva sobre eso "ahora mismo, hoy".

Una segunda orden ejecutiva establece que se prohibirán todas las políticas “discriminatorias” relacionadas con la diversidad, equidad, inclusión y accesibilidad en el ejército. La orden llega después de que la administración Trump ordenara que los empleados de todas las oficinas federales de diversidad, equidad, inclusión y accesibilidad fueran puestos en licencia administrativa remunerada “con efecto inmediato”.

Todas las prácticas de DEI en las fuerzas armadas de EE. UU. también estarán sujetas a una revisión interna por parte de Hegseth.

La tercera orden ejecutiva ordena a Hegseth que reincorpore a todos los miembros del servicio activo y de reserva que fueron dados de baja anteriormente por no recibir la vacuna contra el Covid-19. Serán reintegrados con su rango anterior y se les devolverá el salario y los beneficios atrasados, dijo uno de los funcionarios. Sin embargo, el Pentágono ya había rescindido el mandato de vacunación contra el Covid-19 del ejército , lo que les permitió reincorporarse después de que Biden firmara la Ley de Autorización de Defensa Nacional de 2023 que requiere el cambio. CNN informó en octubre de 2023 que solo 43 de los más de 8.000 miembros del servicio estadounidense que fueron dados de baja del ejército por negarse a vacunarse buscaron reincorporarse ocho meses después de que se derogara oficialmente el mandato de vacunación.

Y una cuarta orden iniciaría el proceso de creación de un escudo de defensa antimisiles de “próxima generación” para Estados Unidos, según una hoja informativa sobre la orden obtenida por CNN.

La orden exige la creación de una “Cúpula de Hierro” para Estados Unidos, tomando prestado el nombre del famoso sistema de defensa antimisiles israelí de corto alcance que durante años se ha utilizado para interceptar misiles lanzados desde Gaza. Estados Unidos financió la Cúpula de Hierro con miles de millones de dólares, y el ejército estadounidense tiene su propio sistema.

“La Orden Ejecutiva ordena la implementación de un escudo de defensa antimisiles de próxima generación para Estados Unidos contra misiles balísticos, hipersónicos, misiles de crucero avanzados y otros ataques aéreos de próxima generación”, se lee en la hoja informativa, calificando esos posibles ataques como una “amenaza catastrófica”, aunque ninguno de estos tipos de armas ha sido lanzado contra el territorio de Estados Unidos en una guerra moderna.

El ejército estadounidense también tiene la capacidad de desplegar un sistema de defensa aérea en capas, desde misiles Patriot de largo alcance, que han demostrado ser eficaces para interceptar misiles balísticos y de crucero sobre Ucrania, hasta sistemas de corto alcance como los misiles Stinger lanzados desde el hombro.

Esta nueva orden ejecutiva exige una serie avanzada de sistemas basados en el espacio para detectar y derribar lanzamientos contra Estados Unidos.

No se dice cuánto costaría el escudo ni se describe un cronograma para su desarrollo.

Michael Williams de CNN contribuyó a este informe.

Esta historia ha sido actualizada con detalles adicionales e información de fondo.

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