Trump firmó una orden ejecutiva que pone en jaque la ciudadanía por nacimiento

NOW: Trump firmó una orden ejecutiva que pone en jaque la ciudadanía por nacimiento
NEXT:

MILWAUKEE (TELEMUNDO WI) - En su primer día al frente de la Casa Blanca, el presidente Donald Trump firmó varias órdenes ejecutivas que marcarán un rumbo controversial para su administración. Entre las más destacadas se encuentra una que busca poner fin a la ciudadanía por nacimiento, un derecho fundamental que, según Trump, ya no es aplicable para todos los nacidos en Estados Unidos.

Con su retórica enfoca en la comunidad indocumentada y la crisis en la frontera sur del país, el mandatario afirmó que “la era dorada de América comienza ahora”. En su discurso, Trump manifestó que la ciudadanía por nacimiento era un derecho que debe ser reconsiderado, especialmente para los hijos de inmigrantes que, según su opinión, no deberían beneficiarse de esta condición.

“La ciudadanía por nacimiento es un derecho que no aplica para todos”, dijo el presidente en un mensaje dirigido a la nación. Aunque sus intenciones son claras, expertos en derecho constitucional han señalado que este cambio no será sencillo ni rápido.

Joseph Malouf, abogado constitucionalista, comentó que, aunque Trump pueda intentar modificar la situación, “no lo podrá hacer de inmediato. Puede que lo consiga en cuatro años o menos, pero no es algo que pueda implementar fácilmente”.

La propuesta de Trump se centra en modificar la Enmienda 14 de la Constitución de los Estados Unidos, que establece que “todas las personas nacidas o naturalizadas en los Estados Unidos, y sujetas a su jurisdicción, son ciudadanos de los Estados Unidos y del estado en el que residen”. El reto, según Malouf, es que, para cambiar esta enmienda, una gran mayoría de los estados tendrían que ratificarla, un proceso que podría tomar años.

La ciudadanía por derecho de nacimiento ha sido uno de los pilares del sistema legal estadounidense. Bajo esta política, cualquier persona nacida en el territorio de EE. UU. obtiene automáticamente la ciudadanía, incluso si sus padres son inmigrantes indocumentados o se encuentran en el país con una visa temporal, como la de turista o estudiante.

Por su parte, Christine Neumann-Ortiz, directora de Voces de la Frontera, una organización que lucha por los derechos de los inmigrantes, destacó que no le sorprende que Trump haya dado este paso. “Era lo que sabíamos que iba a implementar, como lo hizo antes. No es algo que él pueda llevar a cabo inmediatamente, pero sin duda es parte de una agenda que quiere cumplir”, comentó.

La firma de la orden ejecutiva de Trump provocó una rápida reacción por parte de varios estados. Una coalición de entidades, entre ellas el estado de Wisconsin, presentaron una demanda en contra de esta acción presidencial, argumentando que el intento de modificar la ciudadanía por nacimiento no es constitucional y afecta derechos fundamentales protegidos por la Constitución.

El futuro de esta política sigue siendo incierto, pero lo que es claro es que la batalla legal por la ciudadanía por nacimiento apenas comienza. Mientras Trump intenta cambiar el rumbo del país en temas de inmigración, los opositores aseguran que defenderán este derecho con todos los recursos legales a su disposición.

Comparte este artículo: