MILWAUKEE (TELEMUNDO WI) -- Un hombre de 23 años ha sido condenado a 18 años por la muerte de un pastor local: 12 años de prisión, seguidos de seis años de supervisión prolongada, el jueves por la tarde.

José Silva se declaró culpable en febrero de homicidio por uso de vehículo en estado de embriaguez en la muerte del conocido pastor de Milwaukee Aaron Strong.

"Por culpa de José, tuve que elegir un féretro y una parcela para el entierro y planificar un servicio funerario para mi marido de 40 años", dijo Abbie Strong entre lágrimas durante su testimonio durante la vista de sentencia el jueves.

Ella, junto con el pastor James Huebner (que también es líder comunitario en la Iglesia Luterana Grace), y Adam Glodowski, que era uno de los queridos amigos de Strong desde 1996, iniciaron la audiencia con sus testimonios.

"Mi amigo no sólo murió, fue asesinado", dijo Glodowski. "Un acto egoísta, desconsiderado y descuidado".

"Un gran impacto en una congregación nuestra de mil miembros, no es tan fácil reemplazar a un pastor", dijo.

Según las autoridades, Silva se dirigía al servicio de jurado la mañana del 12 de octubre de 2022.

Las imágenes de seguridad grabadas por la Universidad de Marquette se mostraron en la sala del tribunal el jueves. Captó múltiples ángulos de momentos en que Silva conducía en sentido contrario, se saltó un semáforo en rojo cerca de las calles 10 y Wells, y finalmente chocó contra un vehículo que conducía Strong, poco después de dejar a sus dos hijos en la escuela.

La investigación reveló que en el accidente se vieron implicados un total de seis vehículos, dos de los cuales estaban en movimiento y cuatro estacionados.

Silva conducía aproximadamente a 74 millas por hora en una zona con un límite de velocidad de 30, y los fiscales dijeron que los niveles de alcohol en sangre de Silva obtenidos por el Departamento de Policía de Milwaukee encontraron 0,193. En Wisconsin, es ilegal conducir si su contenido de alcohol en sangre es igual o superior a 0,08% y Silva más del doble, ya que había estado bebiendo la noche anterior en su casa.

"Juez, la sentencia que dicte hoy es temporal", dijo la Sra. Strong al concluir su declaración. "La sentencia que José infligió a nuestra familia es permanente".

Las dos hermanas mayores de Silva, Margie Wade y Natalie Mizysak, hablaron de lo buena persona que siempre ha sido Silva.

Wade habló de la dura crianza de su familia, ya que su padre sufrió durante mucho tiempo una adicción al alcohol y las drogas. Wade dijo que este trágico incidente les hizo ver que su hermano también tenía problemas con el alcohol.

"De parte de toda mi familia, pedimos disculpas a la familia de Aaron", dijo Wade entre lágrimas. "Esta horrible tragedia ha destrozado a nuestras dos familias".

La sala del tribunal estaba absolutamente repleta, con algunas personas incluso desviadas inicialmente si no encontraban asiento. Todos guardaban silencio, muchos con pañuelos mientras las lágrimas corrían por su rostro, y otros rezando.

"Si hoy pudiera volver atrás...", dijo José Silva durante las declaraciones finales. "Pero sé que no puedo, esta es la realidad... Quité una vida, algo que nunca pensé que diría... Me arrepiento de lo que hice... algún día espero poder perdonarme, sé que nunca lo olvidaré".

La jueza dijo que esta sentencia era más que una consecuencia, era un mensaje a la comunidad.

"La conducción temeraria, la conducción en estado de embriaguez, los homicidios, no serán tolerados por nadie en nuestro sistema judicial", afirmó.

Se ordenó a Silva que cumpliera 100 horas de servicios a la comunidad mientras se encontraba bajo supervisión ampliada y que pagara una restitución de 806,55 dólares a la familia de Strong.