MILWAUKEE (TELEMUNDO WI) - Dos mujeres fueron acusadas después de que un niño de 4 años disparó e hirió involuntariamente a un niño de 9 años el 8 de noviembre. 

Nakia Piggee, de 27 años, y Vanta'Jah Westmoreland, de 22, están acusados de lo siguiente:

• Descuidar a un niño: la consecuencia es un gran daño corporal, como parte de un delito
• Descuido de un niño: no se produjo el daño especificado, como parte de un delito (tres cargos)
  

Según una denuncia penal, los agentes acudieron al apartamento cerca de la calle 76 y Northridge Lakes Boulevard y una mujer, identificada posteriormente como Piggee, les hizo señas para que se detuvieran y les dijo que su hija de 9 años había recibido un disparo mientras ella estaba haciendo la compra. Piggee dijo que también estaban presentes otros tres niños y que no sabía quién había disparado a su hija ni dónde habrían conseguido un arma.

La víctima identificó a un niño de 4 años en la casa como el niño que disparó el arma, y fue llevada a un hospital de la zona para recibir tratamiento por una herida de bala cerca de su omóplato derecho. 

Los oficiales hablaron con Westmoreland, según la denuncia, quien dijo que ella es la novia de Piggee, y que después del tiroteo, un hombre sacó la pistola de su apartamento y la llevó a otra unidad para que nadie se metiera en problemas. 

La denuncia dice que los agentes observaron que el apartamento de un dormitorio estaba "sucio" y "lleno de comida, ropa sucia, cenizas de cigarrillos y botellas de plástico". Continúa diciendo que el dormitorio estaba "lleno de botellas de licor, cenizas, ceniceros y pañales". Un niño de dos años con un brazo enyesado y una sonda de alimentación fue localizado en una cuna en el dormitorio. Junto a la cuna había un "colchón sucio de tamaño queen", y entre el colchón y la cuna, los agentes localizaron un casquillo de 9 mm. 

Los detectives no localizaron ningún elemento de seguridad para armas de fuego en ningún lugar del apartamento. 

La policía dice que Piggee y Westmoreland dejaron a los niños sin supervisión, solos en el apartamento, mientras fueron a la tienda, y sólo regresaron cuando recibieron una llamada de uno de los niños diciendo que la víctima estaba sangrando.

Los fiscales alegan que Westmoreland dejó su pistola de 9 mm cargada al alcance de los niños, mientras estaba ausente durante 40 minutos. 

Las audiencias preliminares están programadas para el 21 de noviembre.