Liga de baloncesto busca frenar la violencia armada

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RACINE, Wisconsin (TELEMUNDO WI) - Hace poco más de cuatro años, Isaiah Lambart dice que le robaron a punta de pistola en la comunidad donde creció.

"Era una noche fría", dijo Lambart. "Tuve que correr a casa descalzo, casi pierdo los dedos de manos y pies".

Dice que esa dolorosa noche fue parte de lo que le hizo decidirse a quitar las armas de las manos de los jóvenes de Racine.

"Siento que me dieron una segunda oportunidad que a muchos chicos no les dieron en la calle", dijo Lambart, "Así que quise usarla para el bien".

Conocido como "Lul Icey" en la zona, el rapero dice que su violento encuentro inspiró la asociación de baloncesto Put Down the Guns. El grupo pretende animar a los jóvenes del sur de Wisconsin a alejarse de la violencia armada y participar en actividades positivas.

Cuatro años después, unas 80 personas se reúnen cada domingo en el parque Roosevelt de Racine para jugar un partido de baloncesto. Muchos de ellos han tenido experiencias negativas con la violencia armada en sus familias o círculos cercanos.


"En 2017, tuve un hermano que fue asesinado", dijo Larry Canedy, un jugador de baloncesto que forma parte de la Asociación de Baloncesto Put the Guns Down. "Quería representarlo ante la comunidad con esto de aquí. Siento que es bueno".

Lambart y Canedy dijeron que antes de la creación de esta organización, muchos de los hombres que juegan en la liga no se relacionaban con los que no eran de su barrio. Ahora, se oyen bromas juguetonas entre los jugadores y se ven apretones de manos firmes después de cada partido.

"Algunos de estos chicos nunca estarían en la misma zona si no fuera por esto", afirma Lambart. "Sólo quería darnos una plataforma para poder expresarnos, unirnos y poder demostrarnos mutuamente que ambos lados de la ciudad pueden ser uno".

"Isaiah fue probablemente la primera persona que hizo algo así en esta comunidad, y lo necesitábamos", dijo Canedy.

Jesse Booker, director general de Rapcine, afirma que el grupo ha tenido un impacto positivo en la comunidad. Añadió que los hombres que juegan lo hacen con experiencia en baloncesto de alto nivel, lo que hace que los partidos sean emocionantes de ver.

"Hay graduados de instituto, jugadores de baloncesto universitarios y personas que han jugado en el extranjero", afirma Booker. "Para poder jugar un partido de baloncesto, las emociones pueden estar a flor de piel. Poder darnos la mano y decirnos hasta la semana que viene, es algo genial y único en nuestra comunidad".

Se puede encontrar información sobre la liga en su página de Instagram.


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